lunes, 10 de agosto de 2009

Testimonio del servicio en San Cayetano



Bueno hermanitos, les quería comentar un poco acerca de ayer, que fuimos a San Cayetano con un grupete de la parroquia, entre ellos nuestro catecúmeno Iván. A nivel personal fue algo muy lindo que lo volvería a hacer sin lugar a dudas. Más allá del frío y de volver tarde a casa, estuvo genial.

Apenas llegamos fuimos recorriendo un poco toda la cola que había y la cantidad de gente era terrible. Luego nos acercamos a un centro donde un grupo de gente servía mate cocido y pan para que los grupos parroquiales vayamos a repartirle a la gente. Yo empecé repartiendo mate cocido junto a Iván, hicimos varios trayectos por que se agotaba continuamente y teníamos que volver a cargar, además la gente de atrás de todo generalmente nunca le llega el mate y no era justo, por eso nosotros nos íbamos hasta el final de la cola.

Después de unas horas sirviendo mate, me decidí por tomar intenciones a la gente. Fue algo increíble, aunque ya no me daban más los pies y ya se empezaba a notar el cansancio no me importó, y junto a Iván nos acercábamos a la gente.

Es algo de otro planeta lo que la gente te comparte, algunos simplemente agradecen, otros piden y muchos otros te abren el corazón de una manera bárbara.

El testimonio de una anciana que estaba en la fila, me compartió que tuvo un pico de presión el día anterior, y me dijo que no le importó y le pidió al santo para que la acompañe y la cuide en esta misión, cuando escuchaba sus palabras se me ponían los ojos lagrimosos y me ponía muy contento, antes de marchar y seguir pidiendo intenciones, el saludo de esa señora me llegó al corazón y creo que nunca sentí tanta alegría junta.

Después varias personas pedían por salud y por complicaciones que estaban pasando, eso si que fue duro ya que no la estaban pasando de lo mejor, pero está bueno el poder acompañarlos por lo menos anotando sus intenciones y lo que les corre por el corazón en ese momento. Eso es lo que más remarco, y para ponerle un gancho de gracia, una señora me pidió que anotara salud por SANDRO, en el momento me reía solo, pero igualmente está perfecto.

Gracias Seba por haberme invitado y por la buena onda siempre. Lo que he crecido yo creo que lo saben todos y DIOS en principal. Cada día que pasa me alegro más de estar con ustedes y en la parroquia. Espero que el Señor no me suelte de la mano nunca por que va a estar feo.

Mañana nos vemos y los quieeeero así como un montonaso!!!

enviado por vicaria de jovenes de ciudad de buenos aires www.vicariajovenesbsas.org.ar

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